3r Abierto México de Gimnasia

Yo discrepo un poco de la opinión de piotr en la primera parte de su post. Sí es posible ir limando y puliendo pequeños defectos de ejecución con el paso de los años, pero siempre sobre la base de una buena técnica inicial, de ahí que, respondiendo a tu pregunta, fento, lo ideal es que las gimnastas, durante su periodo de formación, es decir, sus primeros años de actividad gimnástica, aprendan bien la técnica de los elementos básicos, porque a partir del dominio de esos elementos es sobre lo que van a ir cimentando la dificultad que posteriormente puedan desarrollar, en función de otros factores físicos, psicológicos, etc. que también intervienen. Por hacer un símil y que quede más claro, tratar de enseñar a una gimnasta un montón de elementos de dificultad cuando todavía no tiene una buena técnica de base es algo así como empezar la casa por el tejado. Primero son necesarios unos buenos cimientos, tanto gimnástica como arquitectónicamente, y sobre ellos ya podremos edificar una construcción sólida y fuerte. A ciertas edades, y Shelgunova con dieciséis años ya es una gimnasta formada, y con determinadas carencias fruto seguramente de un entrenamiento inadecuado en su etapa formativa, no sólo no se suele limpiar la ejecución, sino que en la medida en que se va introduciendo mayor dificultad, los errores técnicos se suelen intensificar.

Un ejemplo de esto lo tenemos en el mismo equipo ruso con Nabieva, una gimnasta con una pobre técnica de base que se traduce en una ejecución sucia. ¿Acaso hemos visto alguna mejora con el paso de los años? Incluso con el cambio físico, al tener la gimnasta que adaptar la técnica a su nuevo cuerpo, en ocasiones esos defectos se hacen más apreciables. Como decía antes, yo creo que el error es pretender que las gimnastas hagan grandes dificultades cuando aún no son capaces de realizar correctamente elementos más sencillos. Recuerdo a Nabieva con poco más de once o doce años haciendo ya un Yurchenko con doble pirueta cuando quizás habría sido preferible que perfeccionara antes el Yurchenko con pirueta. La consecuencia es que la gimnasta se obsesiona con sacar adelante el elemento de la forma que sea, incluso dejando la técnica a un lado, y empieza a enviciarlo, es decir, crea un montón de vicios de los que luego es muy difícil desprenderse, entre otras cosas, porque de algunos ni siquiera es plenamente consciente. ¿Nadie ha empezado a conducir antes de ir a la autoescuela o ha practicado algún deporte antes de hacer un cursillo de iniciacion? Yo sí lo he hecho y os puedo asegurar que, a día de hoy, aún sigo haciendo muchas cosas a mí manera, aunque me las han intentado corregir mil veces, porque así me resulta más fácil que siendo más ortodoxo.

En cuanto a lo de la condición física, todo es relativo. Ser liviana y tener una pequeña estatura tiene sus inconvenientes, pero también sus ventajas, incluso en un mismo aparato. En asimétricas le puede perjudicar sobre todo en las transiciones, y más teniendo en cuenta que hoy en día se trabaja con las bandas muy separadas para favorecer los vuelos, pero precisamente en los vuelos le beneficia, porque su cuerpo puede ir más extendido, facilita un buen swing y la ejecución de las sueltas y los elementos acrobáticos. Lo del Pak yo más bien creo que es un reflejo vicioso que ha adquirido, porque las chinas, por poner un ejemplo, suelen ser casi todas diminutas y hacen unos Paks de ensueño. Volvemos, una vez más, al tema de la técnica que es lo que, en última instancia y pese a encontrar más o menos obstáculos en la propia anatomía, permite abordar con mayor o menor éxito cada elemento gimnástico.